viernes, 20 de febrero de 2015


 EN UN MINUTO

Con Porfirio Gutiérrez

FELICIDADES A LOS MUCHACHOS:
EL TACTO RECTAL SE ACABÓ



Cuando llegué a los 40 años ya había escuchado las truculentas historias de mis amigos mayores sobre el tacto rectal y el cáncer de próstata. La mayoría bromeaba sobre haber pedido segundas opiniones o el haber buscado al médico de las manos más grandes; otros alardeaban que la doctora se había enamorado de ellos; los más se quedaban callados y sólo recordaban para sus adentros aquella fecha trágica para un mexicano en la cual perdieron lo que tanto habían resguardado durante su agitada juventud. Después venía la tranquilidad de saber que no había cáncer y que viviríamos felices muchos años más. 


Una vez hechas las pruebas y encontrado el cáncer, el hombre era sometido a un tratamiento inmediato por que la creencia era que el cáncer era sinónimo de muerte y por tanto había que librarse de él lo más rápido posible. Los estudios documentaron sin embargo que los tratamientos del cáncer de la próstata, sean cirugía o radioterapia, dejan terribles consecuencias. Cinco de cada 1000 hombres por ejemplo mueren dentro del primer mes por complicaciones de la operación de la próstata. Además, un número alto de hombres (30 al 75%) quedan con disfunción eréctil, incontinencia urinaria o problemas con la evacuación del intestino, insomnio, complicaciones que casi siempre son permanentes. Y todas esas complicaciones a cambio de no vivir más tiempo o vivir con menos calidad de vida. Yo tuve el infortunio que a uno de mis grandes amigos de juventud se le detectara tardíamente el cáncer de próstata, pecado añadido el que su profesión fuera la medicina.  

Pues resulta que hoy, después de nuestro sufrimiento mental; de que ya dimos ese “primer gran paso”, que ya estamos polutos (poluto, -ta adj. culto Que está sucio o manchado. impoluto. Diccionario Manual de la Lengua Española Vox. © 2007 Larousse Editorial, S.L.) de que ya nos bautizaron el más pequeño de la casa; ahora nos salen que el mentado tacto rectal no es bueno para los hombres y que los perjuicios producidos por el tratamiento del cáncer son mucho mayores que los beneficios obtenidos por encontrarlo temprano, por lo que este sería el fin del chequeo del cáncer de la próstata. ¡Hágame usted el poluto favor! Y ahora quien nos va a remendar el asterisco? Quien nos borrará esos años de trauma-machito-mexicano de haberlas dado a un extraño aunque fuera facultativo de la medicina? Quien regresará al closet a quienes aprovechando el arponeo digital cordial, se colaron a la zurda de la fila y hoy se visten como Lady Gaga?; ¡Protesto! Sí: protesto como si estuviera en el programa de The Good Wife; solicitaré a mis diputados que el examen de próstata mediante el tacto rectal se decrete como obligación para todos los varones a partir de los 30 años. Y claro, como nuestros diputados siempre están “muy pendientes” de que nuestras propuestas lleguen a la legislatura, estoy seguro que mi solicitud no tardará más de setenta años en hacerse ley ¡Jajá! Esta es mi venganza       


                                                                                                                                                          .  

No hay comentarios:

Publicar un comentario